En plenas fechas decembrinas con el furor religioso a tope por las festividades de fin de año, hubo un hueco donde los amantes de los mensajes oscuros y herejes se reunieron para vivir una noche de puros sonidos extremos y blasfemia al por mayor. Fue en el HDX Bar donde la gente se congregó para recibir por primera vez en nuestra ciudad a los holandeses de God Dethroned. El aquelarre iniciaría desde temprano con la participación de un selecto combinado de bandas mexicanas compuesto por la banda de thrash Wolfskin seguido del performance siniestro y perturbador de Necroneutron quienes con capuchas, horcas y grandes crucifijos invertidos le ponían el toque de performance al evento. Finalmente la brutalidad de Hacavitz dejaba de nuevo de manifiesto por qué hoy por hoy son una de las bandas de más respeto y aparición constante en los eventos de black metal.
Fue entonces que la banda estelar de la noche hizo su arribo, y desde la primera canción titulada “Under a Darkening Sky” indujeron un slam en la pista que no pararía todo el evento. God Dethroned desde el inicio dejó en claro que en vivo son brutales y su presentación sería todo el tiempo una masacre auditiva, lo mismo con temas veloces y sin respiro como “Villa Vampiria” que otros pesados y machacantes como “Soul Sweper” para luego volver a pisar el acelerador con “No Man´s Land”. El eterno Henri Sattler con su siempre característico look sin un solo cabello anunciaría entonces que llegaba el momento de tocar “Asmodevs”, el primer sencillo de su más reciente producción, para luego bombardearnos con una descarga inmisericorde de blackened death metal con canciones como “Christ Carnage”, “Hordes Of Lucifer”, “Necromagnon” e “Illuminati”; quizá esta última la que más tiene un sonido digerible y más pensado para ser un single de gran éxito.
El trono está listo para recibir al rey serpiente con el potente sonido de “Serpent King” y algunos fans en el frenesí empiezan a volar sobre la barrera y subir al escenario a mover la cabeza junto a la banda; unos brincaban de vuelta a la gente y otros de plano eran bajados por la seguridad del foro. “Boiling Blood” y “Poison Fog” fueron los temas tocados a continuación y de verdad el sonido no desmerece ni un momento pues en cada tema se nota que God Dethroned sabe como sonar todo el tiempo como una oscura aplanadora. “Sigma Enigma” y “Spirit Of Belzebu” irían cerrando la velada hasta que la agrupación anunciaría que la que venía sería la última canción. Fue así que “Nihilism” sería en el tema con el que Goth Dethroned al parecer concluía su show ya que incluso hasta la tradicional foto del recuerdo con los fans de fondo se tomaron.
La banda holandesa retoma sus posiciones para sorpresa de todos -incluido el ingeniero de audio que ya hasta las luces y la música ambiental del foro había aventado-, y anuncia tocará un tema más lo que por supuesto es por demás aplaudido por los asistentes; eligiendo “Hating Life” para este propósito. God Dethroned está emocionado y se nota no se quiere ir. “Vamos a tocar ahora si de verdad de verdad la última canción de la noche” anuncia Sattler al micrófono y deja ir de golpe la potente “Storm of Steel” desatando literal una tormenta de riffs infernales con los que ahora si la banda se termina despidiendo. Ya para este entonces estábamos rondando la 1 AM y para los que no tienen llenadera todavía la noche aguardaba otro entremés metalero pues la banda mexicana Raped God 666 -que también estaba anunciada en el line-up del evento y cedió su horario para que God Dethroned no saliera tan tarde- ofrecería una potente presentación para cerrar con broche de oro una noche totalmente agresiva y blasfema.
