oceania

Parque Oceanía y el plan de Live Talent para enfrentar el monopolio de Ocesa

Hubo bastante gente sorprendida cuando hace algunos meses, Live Talent anunciaba con bombo y platillo que inauguraría un nuevo venue dentro de la Ciudad de México para poder realizar su nuevo proyecto: Knotfest meets Force Fest. Ante la evidente ruptura de la compañía originaria de Guadalajara con la gigantesca OCESA dejándola imposibilitada de utilizar el famoso Autódromo Hermanos Rodriguez y el error cometido el año pasado de elegir Teotihuacán como sede de Force Fest – en una historia que ya todos conocemos – era obvio que si Live Talent quería continuar con sus eventos masivos, debía buscar una nueva opción. Y al parecer la encontró.

Situada en el centro/oriente de la Ciudad de México, el Deportivo Oceanía – ahora llamado Parque Oceanía, fue fundado en 1964 y hasta ahora había estado semi-abandonado por gobiernos anteriores, teniendo un nivel de deterioro que si bien no es severo, si fue bastante importante. Es precisamente esto lo que Live Talent busca cambiar a través de una serie de mejoras al lugar, las cuales incluirán en una primera fase el reemplazo total de la valla perimetral del lugar, la cual cuenta con casi 3 kilómetros de extensión para cubrir los más de 250,000 metros cuadrados que el Parque tiene como superficie – en comparación, la curva 4 del Autodromo cuenta con 130,000 metros cuadrados – y dentro de la cual se planea albergar tanto el mencionado Knotfest meets Force Fest como a su hermano mayor, Hell and Heaven que se llevará a cabo en marzo.

Otra de las grandes ventajas que el Parque Oceanía tiene en contra de otras sedes son las opciones de movilidad. El parque está situado sobre la avenida Oceanía y a solo unos metros del Circuito Interior; a unos pasos los asistentes al lugar pueden encontrar dos estaciones de metro, ‘Deportivo Oceanía‘ de la Linea B y ‘Oceanía‘ de la Linea 5. También es una gran ventaja la cercanía con el centro histórico de la ciudad y por supuesto, el Aeropuerto Internacional Benito Juarez a tan solo 5 minutos, por lo que si viajas de alguna otra parte, sin duda esto te será de gran importancia.

metro

Si la queja es que el Oceanía no estaba destinado originalmente para la realización de conciertos, ciertamente la curva 4 del autódromo, tampoco. Como su nombre lo indica, es un autodromo, no un foro. Sin embargo, con buenas adecuaciones, una logística adecuada para llevar a cabo los conciertos y darle el tiempo suficiente a la gente para que se acostumbre y conozca esta nueva sede, pinta para ser un espacio de encuentro para los amantes de la música en la Ciudad de México.

El hecho de contar con una nueva opción para realizar eventos de este tipo y que no estén bajo el control de una sola empresa como sucedía hace unos años es un beneficio no solo para Live Talent, sino para otras promotoras que intenten hacer algo nuevo, lo cual antes era prácticamente imposible, pues Ocesa ejercía con puño de hierro su peso como el gran y poderoso monopolio frente al gobierno en turno, quien le otorgaba concesiones, contratos y favores al por mayor. Ahora, con su evidente perdida de control – debemos recordar que gran parte de la propiedad de Ocesa era de Grupo Televisa, empresa conocida por sus conexiones no muy legales con las altas esferas del poder, las oportunidades para nuevos emprendedores dentro de la Ciudad de México se empiezan a abrir con más frecuencia. Recordemos el caso de Zignia Live y su hermosa Arena en Azcapotzalco, por ejemplo.

Por supuesto, Live Talent tiene mucho trabajo por delante para que el Parque Oceanía cuente no solo con las instalaciones más adecuadas para sus eventos, sino la confianza del público, la cual deberá ganarse de forma paulatina. Todo será cuestión de un buen plan de inversión, estrategia y la correcta planeación en cada una de las etapas de mejoramiento y mantenimiento. El lugar ciertamente tiene potencial, pues cuenta con un tamaño más que suficiente para albergar los festivales planeados y tiene la ubicación perfecta para hacerlo viable.