Cuando ya no aportas nada, vete. Eso es lo que varias bandas deberían entender; bandas que a pesar de seguir “activas” en la industria, realmente ya no aportan nada o que su aporte está tan diluido dentro de la mediocridad que ya a nadie le importa.
Desde bandas que se la pasan reciclando su formula una y otra vez hasta el hartazgo, hasta las que sin más, viven de la nostalgia de sus días de gloria, los cuales se extinguieron hace muchísimos años.
¡Oh! Todos los que tenemos entre 20 y 30 años tenemos recuerdos gratos de Limp Bizit, cuando ellos y Korn encabezaban las listas de popularidad en la época reinante del nümetal. Pero mientras la banda de Jonathan Davis envejeció con gracia y sigue lanzando buen material, Fred Durst y sus pupilos simplemente se quedaron en un bache del que jamás pudieron salir.
Lejos quedaron los momentos del ‘Chocolate Starfish’, cuando todos (claro que sí, tú también, acéptalo) queríamos vestirnos como Durst y nos sentíamos bien papis con nuestra gorra roja volteada, las bermudas y los tennis Jordan. Por cierto, si lo sigues haciendo lamentamos decirte que ya te pareces más a Chabelo que a Fred en su juventud. Anótale.
Aparte de que llevan amenazando con irse como truco publicitario desde hace como 25 años, los integrantes de KISS son el ejemplo perfecto de una banda que vive de las viejas glorias y el consumo de memorabilia que recuerda mejores tiempos. De la nostalgia, pues.
¿Hace cuánto que la banda no saca un disco o video que sea medianamente digno para ser recordado? Ya tiene mucho tiempo, al menos un par de décadas. Incluso su fuerte, los shows en vivos, han perdido color y espectacularidad, pues llevan haciendo exactamente la misma cosa desde antes de que tú, amiguito, terminaras la primaria. “Oh, miren, es Paul Stanley volando entre la multitud… wow, que impresionante…”, es algo que dijo absolutamente nadie desde 1995.
Y sí, ya sabemos que anunciaron -otra vez- su retiro definitivo de los escenarios. Esperamos que esta vez cumplan y no sea el mismo truco chafita de siempre. De esa forma ya no tendremos que leer las declaraciones seniles de Gene Simmons sobre básicamente cualquier tema que no conoce ni le incumbe, ¡sí, sí, Gene! ya sabemos que “el rock está muerto”, ya cállate.
¿Qué se puede decir de un artista que en los últimos 15 años ha lanzado nada más que material que va en una calificación que varía entre regular y malo? La carrera del otrora polémico y temido Marilyn Manson, lleva muchos años metida en la mediocridad y la verdad es que ni siquiera parece importarle.
Mucho dice el hecho de que lo más sonado de “El Reverendo” en ese lapso de tiempo fue su tropezón en Knotfest México, cuando se le cayó encima una parte del escenario y por supuesto, sus escándalos cochinones, que irónicamente hicieron que sus ventas se elevaran en un 40%, pero ¡vamos! ¿cuanto es el 40% de casi nada?
Ni siquiera estamos seguros de que todavía estén activos. Es más, ni siquiera sabemos porque los integramos a esta lista, si lo único que lograron en los últimos 20 años fue ser parte de casi todos los carteles de Hell and Heaven y por supuesto, interpretando ‘Alive‘ siete veces por presentación.
Es más, ignoren esto, es como si no existieran en realidad.
Sí, son toda una institución dentro del rock y uno de los más grandes ejemplos de lo que estuvo bien en el género desde hace casi seis décadas, pero al parecer su formula se agotó. The Rolling Stones al igual que ejemplos como el de KISS vive de la nostalgia y de la disposición de sus fans de escuchar ‘Satisfaction’ and ‘Sympathy for The Devil’ tantas veces como una persona pueda soportar al día.
Mick jagger está a punto de cumplir 80 años y realmente no se ve que la banda pueda o quiera estar activa en el corto o mediano plazo, ¿podrá seguir bailando cuando pretendan volver? Tal vez sea mejor dejarlo por la paz y vivir de esos excelentes recuerdos.
Seamos sinceros, los mejores años de la banda de Steven Tyler pasaron hace ya tanto tiempo que realmente ni siquiera recordamos cuando fue la última vez que presentaron algo medianamente interesante.
Actualmente están por volver, después de cacarear su “despedida” hace apenas, ¿qué? ¿cuatro años? Y nos preguntamos, ¿realmente es necesario? Nosotros creemos que no. Mejor que se queden bien retirados y ya.
U2 están tan muertos, que muy seguramente la última vez que escuchaste algo de ellos, fue porque te los metieron a huevo como descarga gratuita en tu iTunes. Esa es la verdad. Bono ya ni siquiera parece interesado en seguir en la música, sino que su interés se ha volcado totalmente a creerse el sermoneador que el mundo necesita. Pero en realidad, no.
Así que bueno, en resumen, U2 dejó hace muchos años de ser una banda de rock y ahora son una sucursal de atención al cliente de UNESCO. Y no decimos que eso sea algo malo como tal, pero mejor nos dejamos de ser tibios y que se dediquen enteramente a ello.
En serio, ya váyanse.