En su treceava edición, este 01 de octubre del 2021 se llevó a cabo la inauguración del festival internacional Octubre Negro. El festival durante todo el mes de octubre albergará numerosos eventos relacionados con la comunidad gótica en los que se incluirán artes como el teatro, la literatura, la narrativa, las artes plásticas y por supuesto la música. Fue en este rubro en el que teniendo como sede el centro Venustiano Carranza de la CDMX, el telón negro fue levantado con un gran show por parte de las bandas Anabanta, Erszebeth y Übon.
Sentados todos en cómodas butacas y con las más estrictas medidas de higiene y distanciamiento social como los tiempos actuales lo requieren, tras la presentación y discursos de los principales involucrados en el proyecto el concierto arranca con la actuación del colectivo de bandas góticas Übon, una super banda compuesta por miembros de grandes exponentes de la escena oscura nacional como Erszebeth, Vía Dolorosa y Exsecror Vecordia entre otras. Temas como “Anima Banshee” la cual dedicaron a quienes perdieron la batalla del COVID y ya no están con nosotros, o la poderosa “No Rush” fueron interpretadas con gran entusiasmo por todo el colectivo. Los actos circenses con una chica suspendida en lo alto o guerreros aztecas danzando alrededor de los músicos complementaban el performance para agrado del público. La emotividad también tuvo su espacio propio con la hija pequeña del vocalista Rubén bailando feliz de su mano ya que como bien dijo la banda “es momento de demostrar que los góticos no comemos niños, ni matamos murcielagos ni nada, sino que sabemos hacer arte“. Con los sonidos de acordeón y piano que engalanan “El Circo de la inclusión” como tema final dedicado a las personas con una discapacidad auditiva (incluso una intérprete hacía con lenguaje de señas la letra del tema), Übon se despidió entre aplausos con un setlist corto, pero emotivo.
Erszebeth es la siguiente banda en subir al escenario y sin duda su propuesta agresiva y llena de una combinación de belleza con potencia se gana los aplausos de los presentes desde el principio. Temas como “Déjate Morir” mueven de tal forma las fibras de la gente que muchos fans empiezan a ponerse de pie de sus asientos, piropear a Esthibaliz y Christian (cantante y guitarrista respectivamente) y saltar (incluso un fan no se aguanta las ganas de correr a brincar en la zona frente al escenario); a lo que la banda responde pidiendo guardar los protocolos de sana distancia y que permanezcan en sus lugares: la emoción es mucha pero las estrictas regulaciones tienen que respetarse incluso en la oscuridad. A pesar de que las interrupciones en el audio (un aspecto constante tristemente en todo el evento) Esthibaliz incluso bromea al respecto diciendo que los ingenieros también están recién retomando ritmo tras más de un año sin eventos, dejando ver el buen humor con el que la banda se presenta. De nuevo con el apoyo de bailarinas y una producción de luces impecable, Erszebeth se despide dando un show a tope con todo y poderosas guturales que dejan a más de uno sin cuello de tanto agitar la cabeza.
El evento está listo para recibir al grupo estelar de la noche, y Anabanta abre su presentación con “Cerrar los Ojos“, con una Duan Marie que se roba los aplausos y miradas de la gente con un impactante vestido negro que la hace ver como toda una oscura doncella victoriana. “Canto a la Noche” y “Eres tú” continúan con la mágica presentación de uno de los más grandes referentes de la escena gótica en México. Un par de vocalistas invitadas efectúan el llamado “palomazo” en temas como “Nocturna” y “La Melodía de la Noche” respectivamente; para que luego uno de los momentos clímax del show se de cuando Anabanta anuncia se despide con “Vampiro“. Los amantes del arte gótico no dejan de gritar el famoso “otra, otra” pidiendo la banda toque un poco más, y aunque en un principio una de las representantes del evento anuncia en el micrófono esto no es posible por lo estricto del programa debido a las regulaciones vigentes, al final la noche es piadosa y la oscuridad se sale con la suya, y Anabanta regala un poco más de su música. “Esto lo dedicamos a todos los angelitos que no sobrevivieron la pandemia” anuncia con sentimiento Duan, antes de ahora si despedir su presentación con “Tú me Matas” y “El Legado”
Así es como llegó a su fin el inicio del festival internacional Octubre Negro, por más contradictorio que parezca este párrafo. El proyecto nacido con algunos talleres y presentaciones en vivo menos ambiciosas en sus primeros años, hoy ha re-evolucionado tal como el slogan de este año lo anuncia en un programa lleno de actividades ya con apoyo gubernamental y una cartelera completa en distintos recintos de la capital del país. Un ejemplo digno de que con perseverancia y trabajo los proyectos bien planeados crecen, y que la escena gótica se abre paso con pie firme para enseñarle a quien preste atención lo bella, letrada y seductora que puede llegar a ser.
Todas las fotos por Alfredo ALV
