En principios de la década de los ochenta el grupo Parálisis Permanente se convertía en una de las agrupaciones con un ascenso meteórico dentro de la escena punk de España con su estilo sombrío y atrayente, hasta que tristemente y en su mejor momento, la muerte de su fundador y una de sus principales piezas Eduardo Benavente en un accidente fue el parteaguas donde terminó la historia, pero inició la leyenda. Ana Curra, teclista de la banda y pareja sentimental en aquel entonces de Eduardo no dejaría morir ese legado y sigue ofreciendo selectos shows en los que interpreta los mejores temas de Parálisis complementado con temas de su carrera solista. Es justo esta experiencia exclusiva la que tuvo lugar en el foro veintiocho y de la cual les traemos la crónica.
La noche primero se llenaría de sangre y terror con el horror punk de las mexicanas Bloody Benders. Lideradas por Taty Soberon quien es todo un ícono de la escena nacional tanto como frontwoman del grupo como por su labor al frente de uno de los espacios más reconocidos dentro de la escena (el foro Gato Calavera), las chicas se dijeron honradas de poder compartir la noche con Curra, y en un desfilar de zombies, disfraces , esqueletos y mucho punk nos deleitaron con temas como “Fantasmas”, su devoción a las películas de terror reflejada en “Planet Terror”, “The Riot” donde invitaron al slam incluso con Taty bajando a la pista a correr para iniciarlo y cerrando de forma parcial su presentación con “La Vampira”. Entre aplausos y presentado a cada uno de los miembros de la banda incluido un músico invitado quien tocó en muletas en sustitución de la guitarrista de pila , Bloody Benders diría adiós ahora sí con su tema homónimo y el cover a The Ramones con “Blitzkrieg Bop”.
Con una puntualidad exquisita de acuerdo a los horarios publicados por la promotora Producciones Eutanasia quienes hicieron posible el evento, la figura de Ana Curra envuelta en una especie de túnica negra se haría presente para deleitarnos con el sonido perverso y persuasivo de “El Acto“, para luego pisar el acelerador de lleno con el poder de “Adictos a la Lujuria” y “Nacidos Para Dominar“. Ana expresaría en ese momento que había llegado la hora de abrir un portal no solo a los que ya no están con nosotros enunciando varios nombres incluido claro Eduardo, sino también invitando a los incubos y sucubos a hacerse presentes, y el show continuaría con la versión punk y en español de “Heroes” , original de David Bowie, la cual por supuesto fue más que aplaudida. La gente no paraba de festejar y corear cada tema con pasión y así siguió la noche con “En Esta Tarde Gris”, “Esa Sonrisa”, “Quiero Ser Santa” y “Tengo un Pasajero”. Aquí la banda haría una pausa para hacer un brindis con una botella de mezcal para afinar la garganta acompañada de nosotros a quienes nos llamó sus podridos e inadaptados privilegiados, e interpretar “ Aprendiz de Bruja”.
“Este tema lo compuse después de la pandemia, y es producto de una experiencia en Chiapas donde estuve en contacto con las mariposas monarca sin imaginar que tiempo después todo tiene un significado especial que llega cuando menos lo esperas” comparte como reflexión Ana Curra a la gente y agita sus alas moviendo sus brazos al ritmo de “Aphrodita la Monarca”, para ataviarse ahora con una peluca azul y seguir el setlist de forma exquisita con potentes temas tales como “Ghost Rider” , Envuelta en Ron” , Pájaros de Mal Agüero” , “Sangre” y otro de sus covers en español más famosos con “Quiero ser Tu Perra” original en inglés de los Stooges. Los amantes del slam pedían a gritos el tema “Unidos” durante todo el show y finalmente su petición fue concedida, y pese a lo estorboso que es el montículo que se encuentra fijo en medio de la pista del foro, fue ahí donde los amantes del mosh se dieron cita para azotar la lámina. Fue aquí donde Ana Curra hizo una pausa antes de continuar el show desapareciendo todos por unos minutos del escenario.
Ana Curra subiría de nuevo al escenario y pediría absoluto silencio ya que comento era momento de cerrar el portal abierto antes de continuar con el pogo final. Con una interpretación en su teclado de un tema de Bach los asistentes obedecieron de forma respetuosa, hasta que los acordes de “Autosuficentes” hicieron estallar el slam con locura, que se triplicó cuando la carnicería de “Un Día en Texas” sonó a todo lo que daba y las emociones se terminaron por desbordar en la mayor congregación de golpes, brincos y empujones de toda la velada. Fue con este apoteósico final que Ana Curra se despidió de México, no sin antes prometer un pronto regreso. Así, es como el legado de Parálisis Permanente de hecho, permanecerá vivo por este y muchos años más.