El día 09 de septiembre se llevó a cabo la edición 2023 del festival gótico de la CDMX de la mano de Klub Terminal y Diagnosis MX teniendo como sede el renovado Gato Calavera de la capital mexicana. Dicho festival es ya toda una tradición que año con año busca reunir a agrandes proyectos nacionales y extranjeros de la música gótica en todas sus vertientes.
El evento comenzaría con la presencia del dueto post punk Decena Trágica, quizá uno de los proyectos más jóvenes de la noche pues fue recién creado el año 2019, y que dieron un gran performance sin importar que a su hora de tocar todavía no había tanta gente. Posterior a ellos llegaría Fieles Difuntos, que de igual manera maneja un post punk pegajoso y bien estructurado que se ganó el aplauso de la gente con su gran desempeño. Werner Karloff por su parte buscaría con el arte de su sintetizador poner a bailar a todos con su mezcla de sonidos estilo la escena gótica de los años 80´s. Finalmente y para acabar con la avanzada mexicana, los Acid Bats le pondrian gran sabor a la noche no solamente por su estrafalaria y llamativa vestimenta sino por ofrecer un corto pero potente show con un sonido que va desde el post y el after punk hasta el más puro rock gótico.
Desde California llegaría el turno de Frozen Charlottes. Uno a uno los miembros de la banda se irían acomodando en el escenario dejando al último a la bella Janell Grace quien antes del show mostraba un porte elegante y serio, casi inmutable; pero que apenas pisó el escenario envuelta en un velo oscuro se convirtió en todo un demonio mientras abría el show con temas como “Pauper´s Grave”, “Fading Out” y “Lorraine”, todos ellos desprendidos de su disco Wax Venus. Chandler Grace (esposo de Janell) y su inconfundible barba por su parte ejecutaba las cuerdas con poder e inluso se bajaba a tocar a nivel público su instrumento para seguir la noche con canciones como “Born To Lose” y “Sniper At The Gates Of Heaven“; esta última tema original de The Black Angels, mientras que del otro lado su joven guitarrista lucía un aspecto mucho más vampírico y con “sangre” emanando de su boca. Janell fue toda una mezcla de oscuridad, sensualidad y potencia gutural durante el show (incluso cuando su largo vestido se atoraba en sus tacones haciéndole perder un poco el balance) y fue con “Residue” que Frozen Charlottes dijo adiós entre aplausos.
Ya entradas casi las 2:00 am llegaría el momento de escuchar a la banda estelar de la noche, los veteranos 1919 (pronunciado como nineteen nineteen). Con una mezcla de sonidos que va desde el punk y el goth aguerrido hasta el post punk los británicos arrancaron la noche con “After The Fall“, “Anxiety” y “Repulsion” , que hicieron que toda la gente se volcara ahora si a pegarse a la barrera a enloquecer y disfrutar de su acelerado ritmo. Rio Goldhammer quien lleva las vocales desde 2014 baila y gira de un lado a otro y se sube a la barrera a cantar himnos como “Control”, “Bloodline” y “Jackie”, aunque lastimosamente con algunas interrupciones entre temas debido a cierto descontento de la banda con los monitores y la ecualización del sonido. Y decimos himnos porque 43 años de vida en la escena no es algo sencillo de presumir, por lo que de verdad somos afortunados de disfrutar el gran legado de 1919. Su ritmo goth punk desenfadado consigue incitar el slam y los brincos entre la gente que disfruta canciones como “Dream”, “Tear Down This Walls” y “Borders”, y es todo un honor ver al espigado y veterano bajista Simon “Ding” Archer hacer rebotar sus cuerdas con toda la actitud rebelde inglesa al ritmo de “Futurecide”, “Caged” y “TV Love”. Tristemente el también veterano baterista Mick Reed luce bastante enfermo por algún motivo e incluso tiene que detener el show un par de veces para ir a vomitar a un costado del escenario, por lo que 1919 tiene que acelerar su presentación y el show termina con “Satellite Man”, “Revenge” y “Cry Wolf”.
TODAS LAS FOTOS POR RAUL MARTÍNEZ