Zakk Wylde y su BLACK LABEL SOCIETY deleitaron en el José Cuervo Salón.


“Maldita lluvia. Me hará llegar tarde.” me decía mientras me dirigía al José Cuervo Salón para asistir al regreso de Black Label Society y por consiguiente de su legendario lider, Zakk Wylde a nuestro país, esta vez presentando su nueva producción ‘Catacombs of the Black Vatican.” 

La marea de playeras negras con el logo de la banda llenaron el recinto de Polanco en esta noche borrascosa; todos esperando ver sobre el escenario a Wylde mostrando todo su virtuosismo con la guitarra.

La noche comenzó con la presentación de Battlecross, banda originaria de Michigan y que apenas el año pasado lanzaron su tercera producción, ‘War of Will’. Y a decir verdad realmente lo hicieron muy bien, conectaron con el público, haciendo que incluso coreare el nombre de la banda a la mitad de su presentación. Son rápidos, son agresivos, son muy buenos y seguramente con el tiempo y una carrera más asentada, volverán a liderar un show completo. Gran banda telonera, con un futuro alentador.

Tras la presentación de Battlecross, frente al escenario apareció una enorme manta que lo cubría por completo. El público, expectante y emocionado. Casi en punto de las diez de la noche, una lluvia de luces rojas anunciaron la llegada de Zakk Wylde y compañia, quienes iniciaron como ya es costumbre con ‘The Beginnig… at Last’. Wylde se vió enérgico, poderoso sobre el escenario mientras ejecutaba con maestría y canciones como ‘Funeral Bell’, ‘Suicide Messiah’, ‘In this River’ y ‘ Damn the Flood’ volaban por los aires.

Los asistentes estaban totalmente en éxtasis, eso es seguro. Ayudó a esto, el gran empeño en la calidad del audio que la producción del evento proveyó para el show. Además de los grandes clásicos de la banda, no podían faltar los temas de su nuevo álbum, por lo que hicieron aparición canciones como ‘Angel of Mercy’ o el primer single de la producción, ‘My Dying Time’.

La noche terminó con ‘Stillborn’, dejando tras de si, 13 canciones interpretadas, un solo de guitarra digno de los más grandes exponentes a nivel mundial y un muy conmovedor homenaje a Dimmebag Darrel, quien esa noche cumpliría 48 años de seguir vivo. Black Label Society regresó a nuestro país y seguramente volverá de nuevo en un futuro, pero esta noche será difícil de superar. Se los dejo como reto.