El viernes pasado la Sala Sangriento se llenó de punk rock y hardcore con la primera de varias fechas por centro y Sudamérica de Ignite y No Fun At All.
Poco a poco comenzaba a llegar la gente y la primera banda en abrir el escenario fueron los regios de The Artificial Noise. Su melodic punk rock hizo recordar a la la oleada de bandas de ese estilo que abundaban en los 2000´s, con temas como “Rival” ,“Falto de aire” y hasta se aventaron el cover de “Siento que..” original de Jumbo que seguramente a muchos les trajo alguno que otro recuerdo de aquella época.
Siguió el turno de la banda hardcore punk de Orange County, California, Ignite; la cual ya había venido hace unos 7 años al festival Off limits. Empezaron los primeros empujones cuando se escucharon las pisadas iniciales del bajo de la canción “Ash Return” a lo que siguió el tema de “Who Sold Out Now”. Ya para entonces se había formado el circle pit y el ambiente se puso aún más extremo con canciones como “Veteran” y “Bledding”, o más aun con “Sunday Bloody Sunday” cover de U2 pero al estilo hardcore punk. Una sorpresa para el público pasó cuando el bajista Brett Rasmussen se metió en el centro del pit a tocar una canción. Al final Ignite dio una catedra de como hacer un buen show de hardcore.
Tocó el turno entonces de los veteranos del punk rock originarios de Skinnskatteberg, Suecia; No Fun It All. Iniciaron su set con “Tear Me Down” tema de su más reciente álbum lanzado el año pasado titulado Seventh Wave, para luego continuar con otras de sus más viejas producciones como ”Belivers” y “Perfection”. El público se entrego completamente a los sonidos distintivos de No Fun It All y su capacidad para mezclar la velocidad punk con armonías melódicas, ofreciendo una experiencia completamente vibrante. Siguieron algunos temas más como “Suicide Machine” y por supuesto no podía faltar la canción más representativa del grupo: “Beat Me Down”, que convirtió el recinto en una completa locura. Sin duda fue uno de los mejores shows de este género que combinó hardcore, punk, cervezas y viejos amigos.
Texto por Mario López/ Fotos por Raúl Martínez
