Luego de dejar atrás el nombre de Gyze que los puso en el panorama del metal japonés unos años atrás, Ryujin ha mostrado su nueva piel con el lanzamiento de su primer álbum bajo ese seudónimo, homónimo y además, bajo la tutela de Matthew Kiichi Heafy, el líder de Trivium.
El álbum comienza tranquilo, con una breve introducción bajo el nombre de ‘Hajimari‘ y que nos da en menos de un minutos, un resumen perfecto de la ola que se desatará sobre nosotros, llena de riffs poderosos mezclados con sonidos del folclór japonés que ya habían sido la marca de la banda desde sus inicios. Puro metal samurai, pues.
La enorme influencia del estilo de música Gagaku -un estilo que se utilizaba en las antiguas cortes imperiales del Japón- es notoria a lo largo de los doce temas que componen ‘Ryujin‘, además de las letras que están inspiradas por historias mitológicas de la población Ainu, un grupo originario de Hokkaidō, la región natal de la banda y que por supuesto, hacen un eco gigantesca en el ecosistema del álbum
La mano de Heafy es un elemento que se debe destacar, pues ha dado un giro revolucionario de la banda, con una producción extremadamente pulida y una variedad interesante de estilos dentro del disco. Desde riffs completamente pertenecientes al power metal, devastadores pasajes más cercanos al death metal y canciones completas llenas de thrash, todo mezclado con los instrumentos tradicionales del país del sol naciente.
Temas como ‘Dragon, Fly Free‘, ‘Kunnecup’ o ‘Raijin & Fujin‘ serán invitaciones abiertas para abrir el moshpit en cualquier show donde Ryujin se presente. La mezcla de los riffs y la voces de Ryoji Shinimoto con la de Matt Heafy [que participa en cuatro de los temas del disco] es perfecta.
Además, si eres fan del anime, podrás escuchar un cover de ‘Guren No Yumiya‘, el tema de apertura de Attack on Titan / Shingeki No Kyojin bastante genial. Punto extra por ‘Saigo No Hoshi’, una preciosa balada que cuenta con la voz de Heafy y que le da un perfecto cierre al álbum.
‘Ryujin‘ es un álbum potente, lleno de potentes y vertiginosos riffs , una producción impecable y colaboraciones que no solo suman a la receta completa del álbum, sino que se convierten en parte del núcleo musical de esta nueva encarnación de la banda. Sin duda, Ryujin se perfila como uno de los principales embajadores del metal japonés en el mundo.
