El MonkeyBee en su edición 2023 cumplió – y superó- expectativas con un line-up demencial muy tirado al punk y al garage en general que puso a hervir los ánimos a tope con un gran ambiente de principio a fin, en el que el slam, los brincos y gritos así como buenos tragos y un excelente ambiente de comunidad de nicho fueron la constante en esta edición con sede en el Foro 28 de la Ciudad de México.
Quienes llegaron temprano al evento pudieron degustar un delicioso pulque cortesía de la organización al entrar mientras disfrutaban la música frenética de Los Darks con todo y su parafernalia luchística para luego dejarse atrapar por los sonidos más densos y crudos del duo Muto Tapes, quienes a pesar de ser solo dos integrantes hicieron vibrar al recinto con sus acordes devastadores. De ahí la fiesta stoner quedaría inaugurada con The Grizzled Mighty y su hipnotizante mezcla de bestialidad y sensualidad por parte de los estadounidenses Ryan Granger y Whitney Petty, respectivamente.
En ese momento el festival tomaría una vena mucho más tirada al punk primero con los norteamericanos de Reckling, quienes liderados por la explosiva Kesley Reckling encendieron la chispa del slam y dieron una enorme presentación con una propuesta veloz y bastante agradable. Pero si de performance hablamos los Carrion Kids se robaron la noche con una psicodelia estrafalaria a todo lo que da, no solamente con sus vestimentas llamativas y sus looks bizarros, sino por la potencia de su rabiosa propuesta y su manera de interactuar con el público siendo los primeros en abalanzarse a la pista a interactuar con la gente. El punk vendría ahora en su versión más urbana y callejera con la participación de Los Monjo, quienes de forma violenta tomaron el escenario y armaron el mosh pit entre la gente con su propuesta agresiva y por demás ruda.
Uno de los momentos cumbre del festival fue sin duda la participación de The Mystery Lights, quienes dieron un explosivo performance que llenó de energía y mucha emoción a todos los presentes. La verdad es que los norteamericanos son una locura encima del escenario con una actitud que de verdad contagia, brincando y malabareando por todo el stage de principio a fin. Posterior a ello regresaríamos a la crudeza punk con la banda costarricense Ave Negra, quienes por cierto dieron todo en el escenario ya que esta como tal fue la última vez que los veremos tocando en un escenario en México, así que si estuviste ahí literalmente presenciaste historia pura. Y si de momentos difíciles de repetir hablamos la actuación de Intestino Grueso entra perfectamente en la descripción, ya que ver a esta banda del underground mexicano en vivo es algo complicado, y tuvimos la suerte de verla con un set basado en su poco pero casi mítico material existente, y por supuesto con el artista Silverio en las cuerdas como un atractivo plus por el arrastre que tiene el guerrerense hoy en día ¡Todos querían foto con él!
Ya la noche estaba totalmente sobre nosotros pero la gente no daba ninguna señal de cansancio, lo cual quedó de manifiesto con la entrega que la gente dio a la presentación de Bass Drum Of Death. Los originarios de Mississippi fueron quizá la banda de sonido más versátil y cambiante de todo el evento pues se mueven sin pudor del punk veloz al garage crudo, para luego ir a un stoner pesado y de regreso. Y ya para cerrar el evento tuvimos cátedra magistral con el veterano Kid Congo Powers, quien junto a sus Pink Monkey Birds aterrizó sonidos más crudos y refinados con todo el carisma que una persona que ha pasado por bandas del tamaño de The Cramps y Nick Cave y The Bad Seeds puede regalar. Fue con esta gran presentación que Monkeybee despidió esta edición de ensueño , y que nos deja por supuesto con muchas ansias de ver que nos traerá para el siguiente año.
Fotografía: Raúl Martinez