Dropkicks Murphys es una banda de punk surgida en Boston, Massachusetts a mediados de los 90s. Su reconocible sonido que mezcla el poder del punk con las estridentes melodías irlandesas de antaño. En visperas de su regreso a tierras mexicanas -junto a Nekromantix– el próximo 19 de Noviembre, para tocar en el José Cuervo Salón del DF, tuvimos la oportunidad de charlar con el baterista Matt Kelly.
En primera y como presentación para quienes apenas los conocen, ¿de dónde surge el nombre de la banda? Hemos escuchado varios rumores…
Te cuento, John ‘Dropkick’ Murphy era un futbolista, luchador profesional y coach de boxeo; que en hace años abrió una notoria y primitiva clínica de rehabilitación para borrachos de todo estrato económico y social. Los primeros métodos para combatir la adicción, era amarrar a la persona a la cama con correas y darle tranquilizante para caballo. Las leyendas de este pendejo se volvieron infames y pasaron a las historias locales y el folclor. Los padres le decían a sus hijos “¡Si te encuentro bebiendo de nuevo, te voy a meter a la clinica de Dropkick Murphy!”. Hace unos años nos encontramos con un sujeto que estuvo en la clínica [en una grande de Central Mass]. De hecho, su historia inspiró la canción ‘The Sunshine Higway’, que trataba de una camino sembrado de botellas de licor que te llevaban a la clínica de Dropkick.
Boston, su ciudad natal. ¿Cómo es crecer en una ciudad como esa?
Bueno, yo soy de Leominister, que está a 50 millas al Oeste de Boston, en la parte central de Massachisetts. Cuando mi amigo y yo eramos muy jovenes para conducir, tomabamos el autobus hacia Boston para ver a bandas tocar en lugares como The Channel, the Rathskellar, Bunratty’s, the Middle East Café y otros lugares pequeños. Boston era muy distinto hace 20 años, tenía mucho más carácter y singularidad. También había mas peligro, o por lo menos desde la perspectiva de unos niños de los suburbios entrando en lugares llenos de pandillas y violencia. ¡Pero eso le agregaba romance al asunto!
Había mas tiendas de discos y lugares que contrataban a las bandas, había una escena muy grande ahí. Ahora, para bien o para mal es algo mucho más underground, incluso con la internet y la información en la punta de los dedos de la gente.
La ciudad cada día se vuelve más y más como el común de las ciudades de Estados Unidos. La identidad de los barrios cada día se ve despojada por viviendas caras y habitantes transitorios, que insisten en cambiarlos a lo más parecido posible a su lugar de origen en lugar de adoptar la cultura local. Boston es una ciudad en movimiento para bien o para mal. Ya veremos…
Si eres de Boston, te gusta el deporte, es como que una ley. ¿Son partidarios de algún equipo en particular?
Es gracioso, porque en 2001, cuando los New England Patriots ganaron ganaron el Super Bowl, nadia habría dicho que Boston es una ciudad con una tradición deportiva [risas]. Pero si, soy partidario de los Medias Rojas [Baseball] y de los Bruins [Hocket] desde que ganaron sus respectivos campeonatos.
El hockey sobre hielo es mi deporte favorito. Llevo viendo los juegos de los Bruins desde finales de los 70s, cuando me sentaba junto a mi padre a observarlos desde nuestro pequeño televisor en blanco y negro. incluso a veces ibamos a Boston solo a verlos cuando jugaban en el viejo Boston Garden. El hockey es rápido, emocionante y muchas veces, violento. Los jugadores deben tener una habilidad increible en el patinaje, coordinación entre la mano y el ojo, habilidad para pelear, incluso saber de física y golpear el puck al mismo tiempo. Como en cualquier otro deporte, deben saber de estrategia, pero como el hockey es mucho más rápido, esta cambia en cuestión de un segundo, pues el juego cambia en un abrir y cerrar de ojos.
Cuando era joven yo jugaba Hockey callejero, que es lo mismo, pero una superficie plástica en vez del hielo. Es como que la versión barata para las familias que no pueden pagar una pista de hielo -el equipo puede ser muy caro-. Mis jugadores favoritos siempre fueron Terry O’Reilly y Cam Neely.
Una vida dura, y las experiencias en las calles así como los peligros que esta conlleva son temas comunes en el Punk. ¿Es su mejor manera de obtener inspiración?
Estoy totalmente de acuerdo con ello. Siempre. Digamos que es un regalo que el ambiente callejero nos da para componer nuestras canciones. Uno va creando la música en reacción a las experiencias que vas teniendo, y puedes llegar a crear canciones realmente sublimes y hermosas. Bueno, ¡las de Dropkick Murphys no! [risas]
‘Signed and Sealed in Blood’, su último álbum fue un éxito rotundo para ustedes…
Si, los coros son grandiosos y pegadizos. es bien descarado y va directo al punto. Creo que incorporó todas las fortalezas musicales de la banda sin llegar a plagiarnos a nosotros mismos.
Grabamos el disco en medio de giras, así que tuvimos la oportunidad de tocar algunas versionas preliminares de estas canciones y decidir como mejorarlas antes de que el disco saliera. Un 90% de ellas… y a juzgar por la reacción del público ibamos en muy buen camino.
Y sobre sus conciertos, ¿cómo que ya es tiempo de un DVD en vivo de Dropkick Murphys, no?
[Risas] ¡Tal vez, si! Solo el tiempo lo dirá…
‘Signed and Sealed…’ incluye un tema llamado ‘Hero’. ¿Tienes un héroe en la vida real?
G.K. Chesterton es mi heroe. Era un periodista inglés que era conocido como ‘El Maestro de la Paradoja’ y que escribía sobre cualquier tema; desde el contenido de un bolsillo, historia del arte, teología, economía, política y el sinsentido. Podía explicar ideas complejas a través de un lenguaje muy simple. Fue una inspiración para C.S. Lewis, J.R.R. Tolkien; crítico de H.G. Wells y George Bernard Shaw y consejero del economista Hilaire Belloc.
Chesterton fue un hombre grandioso, de una voluntad férrea y una moral sólida a diferencia de muchos lideres de opinión de hoy en día. Respetaba a sus oponentes, incluso si eran diametralmente opuestos a sus puntos de vista y opiniones. Aparentemente, la Iglesia Católica lo está consideranco para canonización en estos momentos.
El Punk está considerado como un género que comúnmente se asocia a la escena underground y a la ideología anticapitalista y sobre todo, contra los grandes conglomerados de medios de comunicación. Pero a la vez, sus canciones aparecen en películas, series de televisión y videojuegos. ¿No es una contradicción?
Algunas bandas de punk tienen ideas anticapitalistas. Algunas. Pero muchas veces solo están siguiendo un paradigma que dejaron las generaciones pasadas o se quieren volver populares en la escena. Lo hacen para ganar fans, no porque lo sientan en sus corazones. No comprenden la historia de los últimos 50 años o el hecho de que tanto el capitalismo como el socialismo son hijos -ambos- de la Revolución Industrial. De cualquier forma, nosotros siempre hacemos lo que queremos y no nos atenemos a dogmas miopes -si, dogmas- que tantas bandas de Punk hacen. ¡Usa al sistema, no dejes que el sistema te use!
Por cierto, creo que soy uno de los pocos sujetos en la banda que odian los videojuegos. ¡Aburrido! [risas]
¿Cómo surgió la idea de fusionar el sonido punk con la música celta?
The Pogues eran punks que comenzaron a tocar música para sus ancestros, tocando covers punk de viejas canciones irlandesas. Ellos fueron una gran inspiración para nosotros. También Oi! y Pist´n´Broke de Detroit, tenían un poco de ese sonido irlandés en su música. Eso fue lo que intentamos con la primera canción, ‘Barrrooooom Hero’. Musicalmente es muy cercana a The Ramones, pero lirica y vocalmente es muy cercana en varios aspectos al tono irlandes. Con el desarrollo de la banda y sus integrantes, poco a poco nos dimos cuenta como inspirarnos de música tradicional celta y la mezclamos con nuestro sonido punk. El resultado es el ruido que hacemos.
Tienen un tema llamado ‘The Walking Dead’ y recordar el show televisivo es inevitable. ¿Te gusta? Tal vez algún día te toque vivir en un mundo zombificado…
Nuestra canción salió en 2005 y obviamente no es de zombies [el show es de 2011]. Por mucho que disfruto cintas como “Night of the Living Dead”, “Return of the …”, “C.H.U.D.”, y claro “Dawn of the Dead”, la verdad es que no soy fan de la serie o de la moda actual de hacer todo Zombie -o vampiros…-. Creo que la gente está loca por ponerse tatuajes de Zombie Task Force o pintar graffitis similares. Creo que la gente necesita una nueva distracción y ver menos tele.
Si viviera en un mundo zombificado, probablemente me iría a vivir a un bote.
Regresan a la Ciudad de México en unas semanas, ¿qué opinas del país y de la audiencia mexicana?
Pues se me hace raro que la frontera norte de México no se parece en nada a la Ciudad de México, la cual a su vez no se parece en nada a Monterrey. Tenía algunas nociones preconcebidas de México, pero las diferencias culturales, topográficas y arquitectónicas entre las dos ciudades que visitamos, me intrigaron. México es un país enorme, con distintas regiones y lo único que se le viene a la mente a un estadounidense pendejo -como yo- es que México es como el viejo Oeste, con desiertos, vaqueros, sombrerotes y la típica comida mexicana de la frontera.
Sobre la audiencia; el show en la Ciudad de México fue enorme, con al menos 2,000 personas, lleno de emoción y energía, como creo que son todos nuestros conciertos. El de Monterrey fue mucho más pequeño, pero la gente fue igual de intensa. Los mexicanos son muy serios y leales a las bandas que aman. Y te lo digo como una persona que es igual de serio con la música.
Fue muy divertido. Todos nos decían “No vayan a salir del Hotel” o “No se vayan a salir del Club”. Tal vez fue suerte, pero jamás me sentí amenazado, ni nadie me molestó mientras caminaba por ahí. ¡Eso si! Cuando llegué me sacó de onda ver a los guardias con ametralladoras. No sé si eso sea normal, pero si me sorprendió.
¿Qué podemos esperar de este nueva visita a nuestro país?
Siempre guardamos el setlist que tocamos, así nos aseguramos de tocar uno diferente cada que vamos a una ciudad. Así que al menos, podrán esperar un setlist diferente al de la vez pasada [risas]. Pero será una mezcla de lo viejo, lo nuevo, lo prestado y algo azul. Tocaremos canciones de todos nuestros discos, algunos covers de nuestras bandas favoritas… será divertido para los fans nuevos, y también para los fans de antes. Esos que nos escuchan desde el EP ‘Boys on the Docks’. Además, claro de mucha energia y poder sobre el escenario.