En algunas ocasiones podemos ser testigos de como se da de forma peculiar la simbiosis creciente entre una banda y su público foráneo. Básicamente la banda visita el país por primera vez en un foro pequeño y resulta ser un éxito, y a la siguiente visita en un foro más grande la historia se repite y así sucesivamente; hasta que un día el grupo hace un sold out a semanas del evento en un venue de aforo bastante considerable. Este es el caso de la banda rusa de post-punk Motorama quienes de la mano de Eyescream Productions han ido creciendo de llenar foros como el Lunario y los extintos SALA Corona y Plaza Condesa; a no dejar ni un hueco en un lugar mucho más grande como lo es el Pabellón Cuervo del Palacio de los Deportes.
Sin teloneros y con cierto retraso que ya empezaba a generar un poco de impaciencia en los asistentes, todo dejo de molestia desapareció cuando los músicos tomaron el escenario y al ritmo de “No More Time”, “Pollstar” and “Tomorrow” arrancaron los agudos gritos de los cientos de fans que no paraban de bailar y corear cada uno de los temas. “Wind In Her Hair” llega a continuación y a pesar de una falla en el audio que baja considerablemente el volumen del evento esta breve carencia de sonido fue subsanada por las voces del público encantados con la presentación. Si bien Motorama es una banda de pocas palabras e interacción, Vladislav Parshin se notaba contento y emocionado e incluso bromeó con invitar cervezas a todos los asistentes de hasta atrás mientras el set seguía su curso con “Up”, “Rose In The Vase”, “Sailor´s Song” and “Empty Bed”: todo ello mientras por momentos su porte serio se desmoronaba al verlo agitar frenéticamente la mano mientras tocaba y sacudirse perdiendo la compostura mientras la agrupación regalaba “Kissing The Ground”, “I See You” and “Ship”. Es en algún momento de esta primera parte del concierto es que el primero de dos muñecos del “Dr. Simi” lanzados al escenario haría su aparición, y dejando de lado la tradicional frialdad con la que se asocia a los interpretes de post-punk ruso Parshin lo recogería para besar su nariz y ponerlo como invitado de honor en la consola.
Si bien todo el show había sido intenso y celebrado de principio a fin, la vibra que se sintió al momento de ser tocada la canción “Alps” fue de otro nivel: las pulsaciones y la entrega de todo el foro explotaron en una sinergia energizante entre Motorama y su gente que de verdad hace a uno entender el porqué del cariño del público mexicano y la excelente respuesta ante cada visita del combinado ruso ¡Vaya momento! De la nada unos globos de colores aparecen y le dan un aspecto todavía más festivo y colorido a la pista al rebotar de un lado a otro mientras la noche avanza con temas como “Heavy Wave”, “Today & Everyday” and “She Is There”. La guapa Irene Parshina en el bajo mueve sus piernas desnudas y engalanadas con un corto vestido de forma discreta pero elegante en cada tema, pero es notorio cómo la emoción la invade y no puede evitar dejar escapar varias sonrisas de su rostro cuando ve la respuesta que generan temas como “Tell Me” and "To The South”; haciendo que de hecho al final la rusa terminara feliz levantando en sus manos a los dos peluches del “Dr. Simi” que cayeron durante el evento al escenario en forma de agradecimiento. El esperado tema “Lottery” en ese momento concluiría de forma momentánea el recital.
Motorama regresaría al escenario de forma rápida y lo haría para dar un cerrojo de oro a su magnánima presentación interpretando primero “Ghost” que de nuevo sería un pico alto de emociones en el concierto con la gente aplaudiendo con sus palmas hacia el cielo al unísono en un marco que enchinaba la piel de verlo y vivirlo: para después ya como tal ahora si despedirse agradecidamente con la también muy esperada “One Moment“. Y es justo así, en literal un momento, que el romance entre Motorama y su fiel público mexicano concluiría por ahora; en espera de nuevo a que el próximo encuentro sea aun más intenso, pasional y grande repitiendo la inercia que se ha venido dando a través de estos años en esta relación de puro amor con su música.
Photos courtesy of Eyescream Productions
