Gran fiesta de metal fue la que vivimos en el Circo Volador de la Ciudad de México con la visita de Wind Rose and Dogma; bandas contrastantes sin duda una contra la otra pero que dentro de su estilo particular hicieron las delicias de los asistentes que disfrutaron a tope ambas presentaciones.
La noche comenzó de forma exquisitamente puntual con la actuación de Dogma. Su performance de monjas demoniacas que incitan a la lujuria y todo el culto que han desarrollado alrededor de su concepto las han hecho escalar de forma trepidante en el mundo del metal siendo una banda de joven creación. La verdad sorprende que en México ya tengan muchos fans que asistieron a su show en solitario un día antes y que en el show que estamos narrando también había mucha gente cantando con todo temas como “Forbidden Zone”, “Feel The Zeel” y “My First Peak”. Es común que por su estética muchos piensen que es una banda de Black metal cuando en realidad ejecutan un heavy metal poderoso y pegajoso que te sorprende, y que no puedes dejar de tararear con temas como “Carnal Liberation”, “Made Her Mine” y “Bare To The Bones”. Muy metidas en su papel siniestro y sin prácticamente intercambiar palabra con el público, Dogma cerraría la presentación con un tributo compuesto de riffs de Megadeth, Iron Maiden, Pantera, Metallica y otras bandas más, para terminar su misa carnal con dos temas más siendo “Father I Have Sinned” la última de la noche para ellas.
El ambiente se tornó en una total fiesta de forma drástica cuando los alegres Wind Rose hicieron su aparición abriendo el show con “Army Of Stone” and "Fellows Of The Hammer”. poniendo a toda la gente a saltar y brincar. Y es que los italianos pusieron a tope el recinto con su famoso Dwarf Metal que literal pone a todos como enanos locos de cuentos de hadas a brincotear con desenfreno. “Esta es una canción que compusimos del otro lado del mundo y que dedicamos a todos los que gustan de beber” commented Francisco Cavalieri al micrófono antes de “Drunken Dwarves”, que es un tema enormemente poderoso y que en efecto pareciera emborrachó a los asistentes pues abrió un slam en medio de la gente que ya nunca más se cerró. Wind Rose invitaba a levantar las hachas lo cual hicieron muchos fans que llevaban armas y picos mineros inflables como parafernalia en “Mine Mine Mine!”, para luego prometer una batalla en la que tal vez no podían prometer todos regresarían con vida pero sí que nadie sería dejado atrás, antes de tocar “Gates Of Ekrund“
La descarga de power and folk metal siguió su curso con potentes melodías como “The King Under The Mountain”, “The Battle Of The Five Armies” y “The Art Of War”, con el guitarrista Claudio Falconcini usando una máscara del luchador Dr. Wagner que un fan lanzó desde la pista. Posterior a ello Wind Rose nos deleitaría con “Tales Of War”y “Together We Rise”, pero sobre todo con la muy esperada “Diggy Diggy Hole” , en la que la fiesta se desató por completo con las pelotas lanzadas desde el escenario y la gente entregada saltando a tope. Tras este clímax de euforia Cavalieri se disculparía por su poco español y diciendo que no es un gringo pero que solo puede darse a entender en inglés agradecería al público su entrega antes de la tranquila y llegadora “Tomorrow Has Come”. “Este último tema habla de una batalla pero no contra un ejercito o un dragón sino contra nosotros mismos, contra eso llamado depresión” anunciaría en tono serio el cantante italiano antes de “I Am The Mountain”, con el que Wind Rose daría por concluida su mágica y poderosa presentación entre una carretada de emocionados aplausos.
TODAS LAS FOTOS POR RAUL MARTÍNEZ
