Chamuco Producciones nos regaló la segunda edición del Darkness Manifesto. Un evento que al momento maneja la dinámica de reunir a 3 brutales bandas de Black o Death Metal difíciles de ver en México. Un evento con toda la esencia trve que repitió la sede del año pasado en el HDX Bar y que como el año pasado también fue una oda a la música pesada y oscura.
La primera banda en hacer aparición fue NervoChaos. A los brasileños sí los hemos visto en otras ocasiones ya en nuestro país aunque con un constante rotar en sus alineaciones por lo que en esta ocasión nos tocó conocer a los músicos que apenas este año se integraron a la agrupación acompañando al baterista Eduardo Lane, único miembro estable desde 1996. Este recién renovado NervoChaos ofreció un show lleno de poder con temas que lo mismo hablan de la guerra como “Lullaby of Obliteration” que temas blasfemos al grito de “Dios no está aquí” en canciones como “Pazuzu is here”. “Total Satan” , “Dragged to Hell” y “Pure Hemp“serían algunos de los otros temas que NervoChaos tocaría antes de dejar el escenario.
Llegaría el turno del debut en nuestra ciudad de Lucifer´sChild. A diferencia de NervoChaos y su sonido Death, los griegos dieron cátedra de como tocar Black Metal de forma brutal con toda la oscuridad y letras herejes como distintivo con temas como “Haraya“, “Nova Tenebris” o “Through Fire We Burn”. Sin maquillaje ni la parafernalia habitual del género los helénicos llenaron de un taladrante y denso ritmo el foro con canciones mayoritariamente densas y pesadas, pero también tomándose el tiempo para canciones con más velocidad y adrenalina oscura. Fueron por demás aplaudidos y podemos decir tuvieron un debut más que exitoso en tierras aztecas.
Finalmente y como gran acto estelar llegaría el momento de Demonical. Una banda que desde la primera canción “Towards Greater Gods” sonó implacable y puso a la gente que ya de por sí estaba animada, en un modo total de slam y ganas de agitar el cuello. Si bien el aforo quedó lejos de lo que se esperaba con el esfuerzo de traer a estas grandes bandas que no vienen a México de forma regular, los que estaban se entregaron con todo al sonido de Death/Black Metal de la banda que masacró oídos con temas como “Into Victory”, “Aeons Of Death” y “The Order”. Charlie Fryksell quien hasta apenas este año tomó las vocales dentro de la agrupación incitaba a toda la gente a acercarse al escenario, mientras temas agresivos como “Wrathspawn” mantenían a los asistentes empujandose en una gran fiesta. Los suecos cerraron de forma magistral su show con su brutal versión de “Somebody Put Something In My Drink” original de The Ramones, así como otros himnos de su autoría tales como “Välkommen Undergång”.
TODAS LAS FOTOS POR RAUL MARTINEZ