¡Toxik está de vuelta, señores! Los creadores del maravilloso “Wolrd Circus” han decidido visitar tierras aztecas para deleite de una fanaticada que seguramente -sobre todo, tras el rompimiento de la banda por segunda ocasión- pensó que jamás los vería en vivo.
Muy temprano, los afortunados fans que ganaron su pase al Meet & Greet a través de las diversas mecánicas de la promotora encargada del evento [Ezkizoofrenia Productions], están ya haciendo fila para conocer a sus ídolos en las afueras del Gato Calavera. Cuando por fin entran todos sus discos, boletos, playeras y claro, sus chalecos, son firmados con gusto por todos los integrantes de la banda. Nada de divas, nada de malos tratos; punto para Toxik.
El talento nacional se hizo presente con las actuaciones de Thrashsteel y Vaffen como bandas de apertura. Un lujo el poder tener a 2 bandas ya consagradas en la escena y con una base de fans firme, la cual sigue a donde quiera tocan. Ambas tuvieron un muy aplaudido recibimiento y dejaron todo listo para que la gran carpa del thrash se levantara.
Toxik hizo su aparición y desde antes de lanzar el primer acorde, ya tiene al público ganado luciendo una bandera de México que un fan les acerca. Un intro instrumental es la alfombra para ‘Sponthaneous’, canción que desata toda la adrenalina de la espera entre los asistentes y comienza la función cirquera, que con ‘Heart Attack’ consigue uno de sus puntos más altos. En el Mosh-Pit hay personas que vuelan como trapecistas por encima del público o domadores de thrashers que parecen fieras salvajes. La velada continua con temas como ‘Pain and Misery’ y ‘Voices’.
‘Door to Hell’ provoca que la gran mayoría de los asistentes no puedan contener sus ganas de brincar y entrar al slam, para después de tan dura prueba relajarse con ‘Greed’ que es una canción algo más sublime y menos agresiva. “Tocaremos un cover de una banda que tal vez ustedes conozcan… ¡Anthrax!” anuncia Mike Sanders desde el micrófono, y los neoyorkinos hacen sonar ‘Metal Thrashing Mad’ de manera impecable. Claro, como en todo buen circo no podían faltar los payasos pidiendo ‘La Chispa Adecuada’ para seguir con el ambiente de covers. En fin…
¡Con bombo y platillo, llegó unas de las canciones más esperadas de la noche! ‘World Circus’ significa la total entrega de los fans hacia la banda. Desde el riff inicial que simula la melodía característica de todo espectáculo circense, hasta el final de la canción con la misma tonada, la gente no dejo de correr y brincar por todo el gato calavera. Sin duda alguna, lo mejor de toda la noche.
Las luces bajan y el ambiente se tranquiliza… Y es que quizá por la hora, mucha gente se retira del recinto -el show comenzó algo más tarde de lo anunciado- seguramente para alcanzar el metro, lo cual mermo mucho el ambiente generado previamente, al menos en la pista, pues sobre el escenario Toxik sigue dándolo todo. Realmente son tipos geniales. ’47 Seconds of Sanity / Count Your Blessings’ y ‘False Prophets’ son tocadas magistralmente seguidas de ‘Haunted Earth’ y ‘Victims’ pero la gente sigue estatica, con la euforia calmada y limitándose a observar el show.
Un muy breve encore precede a la última parte del show, donde Toxik da las 3 llamadas antes de terminar el show. ‘Symptom of the Universe’ (original de Black Sabbath) , ‘Too Late’ y ‘Think This’ para decir adiós y cerrar la carpa. Un cierre de esa magnitud debió ser algo mucho más brutal… pero no. Todo se mantuvo en quietud, un medio ambiente desconocido en el Thrash. Esto obviamente no pasó desapercibido para la banda. “Con esta ultima canción que seguro conocen, hagan una inmensa alberca donde todos corran y nos den todo lo que tienen” piden antes de ejecutar ‘Bonded by Blood’ otro cover, esta vez de Exodus, con lo que la gente se anima y da lo último para un cierre mucho mejor y más decoroso. Much mas thrasher pues. Aun así, la gente está feliz y corre a estrechar las manos de los muy sociables músicos quienes aún se quedan a firmar artículos.
Los reflectores se apagan, la carpa comienza a desmantelarse y los globos se elevan al cielo para no volver jamás. El circo itinerante del metal debe abandonar México y seguir su curso, pero no sin antes dejar un montón de sonrisas en los rostros de sus fans. A pesar de todo, muy buen show de Toxik.