Francia no es un país que se caracterice por dar una gran cantidad de bandas de metal; sin embargo, las que da son generalmente de un altísimo corte. ‘Calidad antes que cantidad’, dirían los que saben. Tal es el caso del blackgaze de Alcest, un dueto que lo largo de casi dos décadas de carrera, ha confirmado una y otra vez que tiene con que ponerse en el gusto de los más exigentes.
El nuevo álbum de la banda, ‘Spiritual Instict’, el cual llegará a las manos de todos el próximo 25 de octubre no es la excepción a la regla que los mismos nativos de Bagnols-sur-Cèze se han impuesto. A lo largo de únicamente seis grandes piezas, reiteran con firmeza esa posición.
El álbum abre melódicamente con ‘Les Jardins De Minuit’, un tema con el sello distintivo de la banda, combinando ambientaciones naturales, con la voz de Neige que cambia de limpia a unos desgarradores gritos que bien podrían encajar en los inicios blackers de la banda.
Si algo sabe hacer bien Alcest, es combinar los tranquilos momentos de calma con ráfagas de furia pura -claro, dentro del shoegaze- como la que nos presenta ‘Protection‘, primer sencillo del álbum, un tema que se va construyendo poco a poco al igual que ‘Sapphire’, siguiendo los mismos preceptos que ellos forjaron en su anterior trabajo, ‘Kodama’.
El título del disco es algo que encaja perfectamente, pues a lo largo de la media docena de canciones, podemos encontrar un aire espiritual, girando a la idea de nosotros como humanidad y lo que significa y hacia donde debemos ir.
‘L’Ile Des Morts‘ rompe el ambiente que el disco tiene de forma general con sintetizadores y sonidos oscuros que contrastan con el mensaje de esperanza que lleva consigo. Es tal vez el punto más alto del álbum y la canción más disfrutable del mismo.
Alcest creó un disco lleno de paisajes musicales bastante interesantes, donde podemos ir de la alegría a la depresión, la melancolía y la algarabía en una sola canción. ‘Spiritual Instinct’, claramente no es el mejor trabajo de la banda; sin embargo es un paso adelante dentro de la evolución de su sonido y a pesar de no estar entre las posiciones de honor no demerita para nada el paso que Alcest lleva firmemente en el mundo de la música.
[penci_review]