Limp Bizkit tenía programado un concierto en Tallin, Estonia, para el 31 de mayo de 2026, pero el evento fue cancelado pocas horas después del anuncio inicial. La decisión se produjo tras la difusión de antiguos comentarios del vocalista Fred Durst, en los que expresaba admiración hacia Rusia y su liderazgo, generando una fuerte reacción tanto en la opinión pública como en autoridades culturales estonias.
El ministerio de Relaciones Exteriores de Estonia declaró que quienes apoyan un estado agresor no tienen cabida en escenarios del país y que los organizadores de eventos deben considerar los valores nacionales. Asimismo, el Ministerio de Cultura confirmó que había advertido a los promotores sobre la incompatibilidad de realizar el show en esas condiciones.
Fred Durst había sido objeto de polémica previamente por sus posturas y vínculos relacionados con Rusia —incluyendo una bandera de Crimea con la inscripción “CRIMEA = RUSSIA” y comentarios en redes sociales— lo cual reapareció como motivo clave en la cancelación. Los organizadores señalaron estar al tanto de dicho historial, pero plantearon que no habían registrado declaraciones recientes desde 2022.
El anuncio generó debate sobre la intersección entre música, política y responsabilidad pública. Para Limp Bizkit esta cancelación representa un revés significativo en su agenda de presentaciones europeas, mientras que para Estonia reafirma su postura de no tolerar manifestaciones de apoyo a agresores internacionales en su ámbito cultural.