Preparándose para la Milicia Infernal…

El pasado viernes se presentó la antesala a Milicia Infernal, festival dedicado a la promoción de los nuevos talentos de la escena metalera nacional. Con algunas de estas bandas en el escenario y bajo el apadrinamiento de Leprosy, comenzamos en punto de las 7 pm con Horn Alligator, conjunto que mezcla un sonido stoner con heavy clásico. Sus piezas instrumentales resultaron magníficas aunque, y este es un comentario que se repetirá constantemente en este texto, tienen poca presencia en el escenario.

Siguió Bad Loving, llevándonos de regreso a los 80s con sus temas cañeros, inspirados claramente por Mötley Crüe o Def Leppard. Es de aplaudirse su uso de sonidos externos para generar una atmósfera. A veces unas simples sirenas, te hacen sentir en la gran arena. Si a eso le añadimos el trabajo de imagen, entre sus pañoletas y pantalones teñidos con cadenas, van por muy buen camino. A continuación, Sabbothaje, tributo a Black Sabbath. Con errores en su parte rítmica y aspecto genérico, su vocalista/guitarrista, sin emular al cien la voz de Osbourne, tiene la actitud necesaria para salir adelante. Battle Raider, en su indumentaria de cuero, aspecto similar al Maiden de la era Di Anno, presentó uno de los shows más gratos. Su heavy es enérgico, el vocalista es potente y encima, saben manejar el escenario. Quizá sus temas pecan de ser un tanto largos pero se nota un tremendo esfuerzo en cada aspecto del grupo. Caso contrario Nagamath, quienes con su black/thrash, no se les ve una dirección concisa. Canciones repetitivas, un serio problema en la batería y falta de seguridad. Cuando se trata de black, uno espera histrionismo diabólico en su espectáculo, indumentaria guerrillera, actitud pesada… literal, queremos ver a Satanás allá arriba, no al vecino con su camiseta de Gorgoroth. Tal vez su reunión debió esperar un poco más.

Bleeding Drunk Skulls tuvo mayor sentido, sin embargo no tienen una personalidad definida en escena. Su thrash está bien trabajado, no queda duda. Ahora vayan por dar un buen concierto. En un cambio de horario, con tres bandas aún pendientes, apareció su padrino Alberto Pimentel para iniciar el show de Leprosy. Entre los clásicos Llora Chiapas, El Infierno de Dante, la grandiosa y reciente Corre por tu vida, dieron un buen concierto como acostumbran. A pesar de siempre ser un viaje nostálgico, demuestran porque a pesar de los años tienen su buen sequito de seguidores. ¡Ya esperamos escuchar nuevo material!

Comentarios aparte de las bandas, merece la ecualización del lugar. En la mayoría de los casos, la voz no se apreciaba del todo bien, a menos que estuvieras pegado a ellos o el vocalista en turno, forzara mucho la voz. La iluminación tiende a ser repetitiva; si encontraran patrones distintos para cada conjunto… otra historia sería. Aún queda un mes (19 de marzo) para el verdadero Milicia Infernal, con los Six Beer e Inquisidor de invitados especiales. Hay mucho trabajo para cada banda, si el lugar de estas leyendas buscan tomar, pero de que el Metal Mexicano tiene representantes dignos, no es de cuestionarse.

Una enorme disculpa con Wild Pistoleros, Metal Tribute y Balam Akab. La dependencia de este autor al transporte público, impidió que estuviera en sus respectivas tocadas. Agradecimiento especial a Juan Santos y JSC Producciones por su apoyo en todo momento.